15/7/11

Acusa alumna de la UNAM a profesor de golpearla




Acusa alumna de la UNAM a su profesor de golpearla

La joven mantuvo una relación amorosa con Arturo Noyola Robles, profesor de Literatura a quien denunció por agresiones

Verónica Mondragón



CIUDAD DE MÉXICO, 6 de julio.- Mariana estudia en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Durante dos años mantuvo una relación amorosa con su profesor de Literatura del Siglo XIX, pero el vínculo alumna- maestro se convirtió en un tormento de golpes, humillaciones, insultos y obstáculos escolares para impedir la titulación de la pasante de Letras Hispánicas.

De acuerdo con una carta que la joven (cuyo verdadero nombre se mantiene en anonimato) envió al Consejo Técnico de la Facultad, en una ocasión el profesor Arturo Noyola Robles golpeó a la joven de hoy 25 años “porque bailó con uno de sus amigos” en una fiesta.

El maltrato incluyó amenazas de muerte para ella y para su familia. Lo que devino en la averiguación previa FCY/CO Y3/ T1/0130/08-01, elaborada tras la denuncia de la joven.

La misiva, de la que Excélsior posee una copia, ya fue enviada a las autoridades universitarias, incluido el rector de la casa de estudios, José Narro, y el 23 de junio pasado fue remitido a las alumnas consejeras técnicas.

Según el texto de nueve cuartillas, Noyola Robles aseguró que Mariana “le robó” el tema de tesis que la estudiante planea elaborar para titularse como licenciada. Sin embargo, ella aseguró que sólo trabajará un poema de Amado Nervo.

En correos electrónicos adjuntos en la carta, el investigador del Instituto de Investigaciones Bibliográficas afirmó que enviaría el caso de robo de ideas al Tribunal de Honor, pidiendo la expulsión definitiva de la chica de cualquier institución de la UNAM.

“Considero que el motivo que ha llevado al licenciado Arturo Noyola a intervenir negativamente con mis asesores (de tesis) y con ello entorpecer mi proceso de titulación, además de las varias amenazas de solicitar en su momento la revisión de mi tesis bajo su escrutinio o exigir formar parte del jurado de mi examen profesional, proviene de una cuestión meramente personal”, reconoció la joven en la misiva.

En enero de 2008, con tres meses de noviazgo, Noyola golpeó en la cara a la mujer por recibir la llamada de un amigo de ella, bajo el argumento de que “quería acostarse” con la chica.

Un día después, tras los efectos del alcohol, continuó golpeándola y amenazándola de muerte, por lo que la chica levantó la denuncia en la Agencia del Ministerio Público Coy-3 ubicada en la delegación Coyoacán.

A partir de eso, ella generó sentimientos de culpa y creyó que estaba haciendo algo indebido, por lo que continuó la relación sentimental. Él la culpó de intentar matarlo, para después llamar a su casa para insultar a la familia y mandar golpear al hermano de la joven.

“Sé que es difícil para la gente que no está dentro del círculo de violencia entender cómo es que una mujer permanece en una relación en la que sufre insultos, amenazas, menosprecio, humillaciones, vejaciones, golpes y la absoluta negación de su ser. Yo misma no lo entendía antes de que lo sufrí”, admitió Mariana.

ngc

2011-07-06 08:24:00

11/7/11

Carta de Denuncia por hostigamiento en la UNAM FFYL

Cart A

Hostigamiento sexual y violencia de género FFYL UNAM

Apoyo a Marcela Lagos....


Amig@s por favor difundanlo, se tiene que saber, casi no tengo tantos mails de otros colegios o facultades. , porfa énchenme la mano y reenvíen. Lean la carta adjunta, es muy dolorosa, pero necesitamos estar informad@s.
Maya

 
 
A quien corresponda:

El pasado 24 de junio presenté una carta ante el Consejo Técnico de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, en la cual expongo el acoso académico del que he sido víctima por parte del profesor Arturo Noyola Robles, quien imparte la materia de Literatura Mexicana del Siglo XIX en dicha Facultad. El licenciado ha intervenido en varias ocasiones con mis asesores para persuadirlos de dejar de apoyarme con la dirección de mi investigación, este hecho proviene de un asunto personal que también expongo. Les hago llegar una versión ligeramente ajustada en la que eliminé los nombres de las personas que pudieran verse afectadas.

Advierto que dentro del texto aparecen palabras soeces que pueden afectar la sensibilidad de algunos.
 
Mis representantes ante el Consejo Técnico de la Facultad y el Comité Académico Asesor de la Licenciatura en Letras Hispánicas, a quienes dirigí, en primera instancia, mi carta, han mostrado de manera constante su interés y apoyo para la resolución favorable de mi caso.

Ahora, hago del conocimiento de todos ustedes lo que he experimentado en los últimos meses y solicito su solidaridad ante la gravedad de estos hechos. Por favor, difundan este mensaje entre sus contactos.
 
Marcela Lagos
Pasante de la licenciatura en Lengua y Literaturas Hispánicas
Facultad de Filosofía y Letras
UNAM

19/5/11

La marcha de las putas en el Distrito Federal, MX.


El domingo 12 de junio, las mujeres en la Ciudad de México nos sumamos a La Marcha de las Putas, saliendo a caminar con el único propósito de dejar en claro que NO, es NO.

Este movimiento, pretende decirle a la sociedad civil, política, religiosa y cualquiera que sea su función en este país, que no importa la vestimenta, el lugar, ni la compañía; nada justifica la imposición de relaciones sexuales  o el acoso sexual. La mujer no provoca VIOLENCIA, ni AGRESIÓN; por el solo hecho de ser responsable y libre al ejercer su personalidad, ideas y principios. 


Rechazamos firmemente, y en una sola voz, que se siga perpetuando y naturalizando la idea de que somos culpables del acoso y ataque sexual, que el día a día en pleno siglo XXI, continúa siendo un enfrentamiento al salir a las calles para estudiar, trabajar, divertirnos y vivir.

  • Ya no más a asumirnos como objeto de estereotipos, prejuicios y discriminación. ALTO a viejos e inseguros paradigmas, que generan DISCRIMINACIÓN.
  • Ya no más ACTOS SEXUALES FORZADOS, cuando las mujeres decimos “No”, sólo puede significar “No”.
  • Ya no más FALTA DE RESPETO ni fuera, ni dentro de cualquier espacio, desde cualquier civil, hasta autoridades de cualquier nivel.
  • Ya no más INSULTOS a la educación, por ignorancia; no más IGNORANCIA por falta de educación.
  • Ya no más naturalización de la violencia de género con el argumento de que es nuestra culpa porque parecemos putas. Como si ser trabajadora sexual fuera una justificación para ser violentada.

Por ello, nos unimos a La Marcha de la Putas, que tiene su origen en la Ciudad de Toronto, Canadá.
El pasado 24 de enero, el policía Michael Sanguinetti ─durante una conferencia, en la Universidad de York, sobre seguridad civil─ indicó que “las mujeres deben evitar vestirse como putas para no ser víctimas de la violencia sexual”. Indignadas las mujeres canadienses salieron a marchar, el 3 de abril, vestidas de tacones, ligueros, escotes y minifaldas tomaron las calles de Toronto, Canadá. A esta indignación se le unió toda la sociedad: mujeres y hombres marcharon para pedir una disculpa por parte de la Policía. Sin embargo, el movimiento ha crecido y esta marcha se sigue replicando, exigiendo el respeto y la protección sin discriminación.
¿Por qué putas? Históricamente, el término “puta” se encuentra cargado de un significado negativo y peyorativo; puta es una mujer promiscua, que tiene relaciones sexuales por dinero, por placer, que viste de manera inapropiada, que no es una buena mujer. El término sirve como una forma de insulto o etiqueta para el comportamiento de mujeres que se encuentran fuera de lo que la sociedad considera adecuado y aceptable. Bajo esos parámetros y criterios, en cualquier momento de nuestras vidas, las mujeres somos putas y como putas debemos aceptar y callar que se desplieguen comportamientos sexuales sin consentimiento.
Con esta marcha, nos apropiamos de la palabra “puta” para rechazar cualquier tipo de violencia ejercida hacia nosotras con el pretexto de nuestra apariencia y manifestamos que ni las trabajadoras sexuales ni ninguna mujer debe ser violentada “por puta”.
Cansadas de escuchar que las mujeres provocamos y por ende somos las culpables, hoy decidimos organizarnos para decir:

¡Basta! Yo decido sobre mi cuerpo y No, es No.
♀      Si me pongo medias de red y tacones de aguja: no, significa no.
♀      Si la apertura de mi falda sube hasta mi muslo: no, significa no.
♀      Si en cualquier momento decido no consumar el acto sexual: no, significa no.
♀      Si me pongo una borrachera marca no se asuste: no, significa no.
♀      Si bailo de forma sensual: no, significa no.
♀      Si el escote de mi vestido es épico e invitador: no, significa no.
NO, SIGNIFICA NO.

Invitamos a que se unan no sólo las mujeres sino todas las personas, de cualquier expresión y orientación de género, profesión, nivel educativo, raza, etnia, edad, capacidad, de todos puntos de la ciudad, para hacer una declaración unificada sobre la violencia sexual y el derecho de las víctimas. Así como, para exigir respeto para todas y todos.
Únetenos en esta misión al correr la voz para declarar que quienes sufren violencia sexual no son culpables, sin excepción.

La cita es el domingo 12 de junio. Saliendo de la Palma de Av. Paseo de la Reforma, a las 14:00 hrs hasta el Hemiciclo a Juárez.

Para mayores informes:
marchadelasputasdf@gmail.com

24/3/11

No mas represión en las universidades (UAM-I)


El motivo de este mensaje es informarles que el dia de ayer representantes de la coyuntura de organizaciones estudiantiles de la UAM-I, fuimos por la respuesta sobre el pliego petitorio entregado hace 2 semanas al secretario gral. y dirigida al rector de la unidad iztapalapa, pero la respuesta fue esta:
 
Desalojaron a los colecivos de la plaza del estudiante, lugar llamado asi por las organizaciones estudiantiles de la universidad, espacio de expresión política, artística y cultural. El motivo del desalojo es la molestia que representa para las autoridades la presencia del Café Zapatista, quienes laboran en comunidades del EZLN, y la Asamblea Estudiantil, quienes laboran en comunidades de Oaxaca y paticipa el la difusión política de organizaciones sociales.
 
Ante esta situación hicimos un mitin y nos manifestamos dentro de la universidad rumbo a rectoria, y nos recibieron con un baya de 20 tipos del personal de confianza, junto con golpeadores contrados por la universidad, prottección civil y seguridad.
 
Al no dejarnos pasar, las mujeres fuimos quienes nos pusimos al frente y pedimos el diálogo, que por lo menos nos dejaran pasar a nosotras para hablar con el rector y/o el secretario general. Y comenzaron las agresiones, nos empujaron, nos jaleonaron, a dos compañeras las patearon en las piernas y si no agarramos a otra compañera la tiran de las escaleras. Pero lo peor fue cuando nos lanzaron gas pimienta! un gas que aspiramos 15 compañeras, que nos dejo la faringe irritada, ascos y dolor de cabeza. A una compañera se le hincharon las manos, y esta situación provoco mayor inconformidad de la comunidad universitaria. Sobre todo cuando el punto numero uno del pliego petitorio es que la UAM se proclame contra la represión en el país, la militarización, la violencia feminicida! y miren con que nos responde nuestra casa abierta al tiempo!!
 
Hacemos denuncia de las provocaciones por parte de las autoridades de la universidad y su personal de confianza!
 
Tambien denunciamos la intimidación que nos ha hecho llegar hoy por la mañana con las fotografias y videos tomados en donde se nos acusa de tomar violentamente la universidad cuando fueron ellos quienes nos recibieron con violencia y se cerraron al diálogo!
 
Hago denuncia de las agresiones recibidas y de dos compañeras mas del Grupo Interdisciplinario Feminista, que como grupo pacífico y contra cualquier tipo de violencia, recibimos un comunicado del rector el cual no responde a ninguno de los puntos del pliego petitorio, que no hubo diálogo y que ahora nos amenazan con la expulsión y suspensión por el simple hecho de pedir ser escuchadas en la reunión que se esta llevando acabo ahorita en el consejo académico.
 
Pedimos a las organizaciones sociales, a la comunidad estudiantil de otras universidades que esten al pendiente de nuestros comunicados y de la situación represiva que se está gestando en la UAM-Iztapalapa. Ademas de la constante intimidación que tenemos en diversos espacios de la universidad con la política de vigilar y castigar, la implementación de cámaras por toda la biblioteca, los edificios de ciencias sociales y humanidades y pasillos de la universidad.
 
Atte.
 
Sara, estudiante de matemáticas,
Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa

29/1/11

Construcción del sistema patriarcal

El sistema Patriarcal por Karina Rodríguez Moreno (Colectiva Degeneradas)

La masculinidad racional[1] – producto de la ilustración – surge para legitimar mediante la razón la organización de la vida pública y privada (a imagen del varón), definiendo mediante la racionalidad lo mejor para ellos y para los otros (mujeres y niños), de este modo establecen los criterios con los cuales los demás deben actuar y hablar -se constituye el sistema patriarcal- y como Kant alguna vez lo reafirmo argumentando que “la mujer podía escapar a su naturaleza y buscar la guía de la razón mediante la relación con un varón” (Kant en Seidler, 2000:26), en ese sentido los varones aprendieron a confiar en su propio razonamiento como “el único”, “el verdadero”, aprendieron que la mujer esta relacionada con la naturaleza, aprendieron que la razón simplemente es suya.
            Bajo esta ideología “racional” se sentaron las bases y parámetros sociales y culturales que configuran a los varones como entes superiores – sistema patriarcal – excluyendo a lo de carácter “natural e inferior” como las mujeres, las etnias, los niños y las minorías sexuales. De igual modo Durkheim decía que “el individuo debe someterse a la sociedad, esta sumisión se convertirá en su liberación […] la mujer esta mas cerca de su naturaleza, entonces depende de ella someterse a la autoridad del hombre como condición de su propia liberación” (Durkheim en Seidler, 2000: p. 32 - 33); Luego entonces el sistema patriarcal se convierte en la ideología dominante impregnada de valores masculinos, mismos que encasillan a las mujeres como objetos volviendo a los varones como sujetos de acción y de poder, con ello las características atribuidas a cada sexo se refuerzan y los varones adquieren rasgos que les permite adquirir privilegios dentro de la sociedad, rasgos que a su vez niegan la existencia de otro tipo de conocimientos como los sentimientos y las emociones[2], ya que están relacionados con la naturaleza, las mujeres y la debilidad.
            “El sexo biológico es destino para los hombres que además de homogeneizarlos los vuelve cómplices de un régimen que, nos dicen las feministas excluye y daña a las mujeres” (Núñez, 2004: 49). Se establecen pues los significados de “ser hombre” subyugados a las características de la identidad esperada, de esta forma las técnicas de poder operantes en el campo sexual y de género actúan como negación de la capacidad epistémica y de conocimientos sobre “los hombres” y la “hombría”, esta negación esta fundamentada en la desacreditación de su propia condición de “hombres” bajo un discurso androcentrista y homofóbico[3].
            La sexualidad masculina se vuelve entonces la verdad del mundo, “los varones de verdad” se ven en la necesidad de demostrar constantemente su virilidad imponiéndose no solo ante las mujeres sino que también tiene que imponerse ante los mismos varones, esto con el fin de demostrar poder y autoridad, sin importar los riesgos que esto conlleve, riesgos que violentan mediante acciones y hechos a las mujeres, a las niñas, a los niños y a los propios varones.
            El sistema patriarcal es un sistema violento “hecho por lo varones y para los varones”, un sistema que nos perjudica a todos los humanos, un sistema que es fundamental para el feminismo, ya que “define a la organización política, ideológica y jurídica de la sociedad cuyo paradigma es el hombre (los hombres, cada hombre), que se basa en el sexismo (la opresión o los privilegios según el sexo de las personas) y se expresa cotidianamente en el machismo, la misoginia y la homofobia”[4] .
La denuncia de la opresión genérica (mujeres subordinadas) es el eje transversal de la lucha feminista, lucha que a su vez es “filosófica, científica y ética”[5], los logros del feminismo han trastocado los ámbitos políticos abriendo puertas para seguir transformando. La lucha feminista tiene como meta construir la equidad en las relaciones entre mujeres y varones, es decir, el feminismo es una conciencia política que no esta enfocada solamente a mujeres sino que, para lograr sus principales objetivos incluye al varón en sus propuestas de cambio.


[1] A través de la historia siempre se ha justificado la superioridad del varón sobre la mujer, desde la antigua Grecia se hablaba de que el intelecto y la razón eran propios del género masculino y con la llegada de la Ilustración esta ideología quedo formalmente institucionalizada.
[2] Ver Núñez Noriega Guillermo (2004), “La producción de conocimiento sobre los hombres como sujetos genéricos: reflexiones epistemológicas”, en Desacatos Revista de Antropología Social, No. 15, México.
[3] Parafraseando a Guillermo Núñez ver pp: 52.
[4] Ver Articulo de Daniel Cazés en  http://www.hombresigualdad.com/ponencias.htm


Bibliografía:


Núñez Noriega Guillermo (2004), “La producción de conocimiento sobre los hombres como sujetos genéricos: reflexiones epistemológicas”, en Desacatos Revista de Antropología Social, No. 15, México 2004.


Seidler. J. Víctor, (2000) “La sin razón masculina”, Editorial Paidós, Barcelona (2000)






Sobre el Sistema sexo género

Qué es el sistema sexo género  por: Karina Rodríguez Moreno (Colectiva Degeneradas)


El sistema sexo – género es un sistema binario que separa a mujeres y a varones, donde “la mujer aparece como lo negativo[…] y se determina y diferencia en relación al hombre, y no éste en relación a ella; ésta es lo inesencial frente a lo esencial. El es sujeto, él es lo absoluto: ella es el Otro.”(Beauvoir, 1989, 14), en ese sentido la mujer es considerada como la otredad de carácter natural e inferior que tiene que ser sometida a la protección y a la razón características que solo puede brindar la “esencia masculina”. Bajo estas condiciones de superioridad e inferioridad se establece la división sexual del trabajo como natural, es decir que de acuerdo a las características “propias” de cada sexo se determina la labor a la que socialmente estamos "destinados", las mujeres a lo privado a los quehaceres domésticos y los varones a lo público.

            Lo cierto es que “los dos sexos no han compartido nunca el mundo por partes iguales, y todavía hoy aunque su condición está evolucionando, la mujer padece de muchas desventajas”(Beauvoir, 1989,19), desventajas que se ven reflejadas en distintos ámbitos, a nivel laboral, jurídico, social, económico, político y cultural, es decir que, aun sigue habiendo desigualdades que siguen violentando a los seres humanos, aun sigue permeando el ideal de superioridad masculina sobre la femenina, sigue existiendo una ideología patriarcal en las instituciones, sigue habiendo abusos por parte de un género o de otro.


El sistema sexo – género propone que la conformación de las identidades femeninas y masculinas no son puramente biológicas, sino que se han construido históricamente a lo largo de procesos socio-culturales, en los que la oposición y la lucha de poder permanecen como variables constantes e “inamovibles”, en ese sentido se establecen posiciones de superioridad que bien son asumidas por el varón como propias generando con ello un sistema patriarcal que lo dota de poder para someter y subordinar a la mujer.

            Para Scott (1999: 61) el género tiene dos partes y varias subpartes que se encuentran interrelacionadas, el género es un elemento constitutivo de las relaciones sociales basadas en las diferencias que distinguen los sexos; el género es una forma primaria de relaciones de poder. El género comprende cuatro elementos interrelacionados:
  • Símbolos culturalmente disponibles que evocan distintas representaciones mayormente contradictorias entre sí.
  • Conceptos normativos que coercionan a dichos símbolos.
  • Análisis incluyente que unifique al género con los ámbitos políticos, institucionales, económicos, sociales y culturales.
  • Identidad subjetiva y aculturación genérica.
Por otro lado West y Zimmerman (1999: 114) nos dicen que el género es un status adquirido, construido no solo cultural y socialmente sino que también se construye psicológicamente, ya que dicho concepto se reduce a un conjunto permanente de características psicológicas y a una variable unitaria como el cuerpo y se excluye como es utilizado para estructurar distintas esferas de la experiencia social “hacer género proporciona el andamiaje interactivo de la estructura social, junto con un mecanismo interno de control social” (West y Zimmerman, 1999: 142).

Lamas(1996) nos dice que el género muestra mejor que ningún otro ejemplo la violencia simbólica que esta más allá de los controles de la conciencia y la voluntad, estos actos son encontrados en los habitus esquemas que a su vez son de género y engendran género, con ello se impone el género a varones y a mujeres y la dominación de un sexo sobre otro, institucionalizándose mediante el matrimonio y la familia, excluyendo así diferentes preferencias sexuales y diferentes formas de articulación de la familia es decir la homosexual y uniparental, se institucionaliza la heterosexualidad obligatoria y con ello la castración en ambos sexos, mientras el varón es mutilado respecto a sus emociones, su subjetividad y preferencias, la mujer es mutilada sexualmente, socialmente y culturalmente sometiéndola a la autoridad del varón.

Bibliografía:

De Beauvoir Simone, (1989), “El segundo sexo, 1 Los hechos y los mitos”, Alianza editorial, Siglo XXI. México.

Butler Judith (1996), Variaciones sobre sexo y género: Beauvoir, Witting y Foucault, en Lamas Marta (Comp) El género: La construcción cultural de la diferencia sexual, México. PUEG-UNAM, pp 13-56


West, Zimmerman, Rich y Scott (1999), en Navarro Marysa y Catharine R. Stimpson: “Sexualidad, género y roles sexuales, Fondo de Cultura Económica, México.